
El Kuga amplía su campo de acción, de un simple SUV de carácter familiar, con este motor y autonomía eléctrica pasa a tener un perfil más deportivo y también urbano
En Resumen.
El nuevo Kuga cuenta con una interesante versión enchufable que tiene un tono deportivo. Pero hay que decir de entrada que solo para los que dispongan de un enchufe a mano diariamente.
Cuenta con 224 cv y una batería que le permite una autonomía 100% eléctrica recargable desde un enchufe de unos 40 a 50 kms reales. Su chasis es de concepto más deportivo y rebajado en este acabado ST-Line, con una dirección muy directa, pero es una pena que no cuente con levas ni para el cambio ni para niveles de reducción.
En el día a día podremos evadir la gasolinera, en su uso como híbrido los consumos se aquilatan y a la hora de curvas tenemos buena potencia para divertirnos, adelantar seguros o incorporarnos a las autopistas con garantías. La facilidad del cambio de variador, sin marchas es cómoda para la ciudad, pero resta enteros en un trato deportivo, que como decimos estamos invitados por una suspensión endurecida y una dirección muy rápida.