Un GT a buen precio en el segmento premium, con notable en casi todo y que te puede dejar muy satisfecho comparado con coches de 10.000 Euros más
El nuevo Kia Stinger con sus 4,8 metros de largo – 3 cm menos que el Óptima – se puede definir como un GT premium en directa competencia con otras berlinas europeas en tamaño y motores potentes pero contenidos, un buen equipamiento y un confort adaptable a las prisas que tengas, porque sin ser un coche radical, sí te permite un trato deportivo a la vez que tirar millas por carretera en un viaje familiar.
5 puertas, 4 plazas de lujo – más una quinta también utilizable – y un motor, este diésel, de consumos razonables, le hacen ser un coche vistoso sin una desmesurada inversión, con un precio de la potencia más elevado en los motores diésel, pero muy razonable en los de gasolina, con su buque insignia el Stinger GT, con un motor ya de palabras mayores (370 cv) para un deportivo y un precio de la potencia realmente interesante.
200 cv diésel y tracción total.
Pero hemos conducido la versión diésel – Stinger 2.2 CRDI – de 200 cv, aunque parecen más, es una cifra básica para el estilo y aspiraciones de su segmento. Pero un motor con 440 Nm desde menos de 2.000 vueltas que le hace parecer mucho más potente, con el que se pueden llevar ritmos altos, y meterte en curvas con muchas garantías y gran efectividad, porque dispone de tracción total si queremos, y es el caso de nuestro Stinger 2.2 CRDI 4×4.
3 motorizaciones disponibles.
Siendo un coche de la misma talla que el Óptima, sólo 3 cm menos, tiene una filosofía más deportiva, con 5 puertas y motores más potentes. Su gama contempla 3 motores, dos de gasolina y uno más diesel, toda la gama comparte el cambio automático de 8 relaciones. En gasolina el motor alto es el tope de gama y cuenta con tracción total y el motor diésel, el de nuestra prueba, se dispone en tracción trasera o total.
En cuanto a acabados se ofrecen 3 básicamente y un cuarto exclusivo para el motor gasolina alto, el GT.
5 puertas y un maletero mejorable
Aunque pueda parecerlo, el Kia Stinger no es más largo que el Kia Óptima, es 3 cm más corto. Se queda en 483 cm con una distancia entre ejes mayor, con menos maletero y la ventaja de una quinta puerta. O sea lo que ahora se dice GT, coches grandes pero de filosofía más deportiva que familiar.
Tiene los pasarruedas ensanchados, desde atrás nos recuerda mucho al estilo de los Jaguar o Maserati, con algunos elementos aerodinámicos activos, como las aberturas en aletines y capó para facilitar flujos aerodinámicos. No cuenta cuenta con llamativos alerones, y en su trasera este diésel tiene una única salida de escape lateral que es doble.
Su gran portón trasero da paso al maletero, de capacidad discreta para su talla, 483 litros. No es demasiado profundo y en su doble fondo hay compartimentación para objetos planos y aquí encontramos el kit de reparación de pinchazos y la bolsa de triángulos de emergencia. También como muchas veces nos ocurre el chaleco de emergencia, que rápidamente pasamos al habitáculo por aquello de evitar alguna multilla.
Los abatimientos son asimétricos, tiene anclajes para una red de suelo, que vendría bien comprarla aparte porque no tiene ganchos para bolsas ni compartimentos de ningún tipo. Tampoco tiene toma de corriente y el portón es eléctrico. La bandeja de ocultación es rígida y enorme, y no tiene forma de ocultarse tras retirarse.
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