
Las ventas comenzarán en este último trimestre • 3 motores y 4 acabados a elegir desde 200 cv
Kia ya ha puesto precio a su GT, el deportivo Stinger, una berlina de 4,8 metros de largo con potentes motores y alto nivel de equipamiento.
El Stinger se fabrica en Frankfurt, ha sido diseñado en Europa para el mercado europeo, tratando de hacer frente a modelos radicados en el viejo continente de las marcas premium como Audi o Mercedes-Benz.
En su diseño final los ingenieros se han inspirado en el Kia GT Concept de 2011.
Línea coupé en una berlina premium.
Los 4,8 metros de largo con una distancia entre ejes de 2.905 mm garantiza 4 plazas lujosas de espacio, aunque está homologado para 5. El maletero tiene 406 litros, y tenemos abatimientos posibles en los asientos traseros que permite un espacio de carga hasta de 1116 litros.
Es el modelo más potente y de mayores prestaciones que ha fabricado jamás la marca coreana, y llega con 3 potentes motores, desde 200 cv del 2.2 diésel, con otros dos de gasolina: el 2.0 T-GDI de 255 y el tope de gama el 3.3 litros V6 con 370 cv.
Todos tienen cambio automático y secuencial de 8 relaciones con levas en el volante, estrenando en la marca el convertidor de par con absorción por péndulo centrífugo, una tecnología que es más habitual en competición, reduciendo las vibraciones torsionales en la transmisión.
El Kia Stinger cuenta con un selector de perfiles con 5 programas de respuesta de modo automático que también controla el nivel de asistencia de la dirección, respuesta del acelerador y de la suspensión electrónica, ésta disponible de serie en los acabados GT. Un sistema que permite la regulación de dureza de ambos ejes de forma independiente, con lo que podemos gestionar la respuesta ante un temperamento subvirador o sobrevirador.
La dirección es de cremallera y con relación variable, está asistida por un motor eléctrico montado directamente sobre la cremallera, lo que hace posible una respuesta más inmediata y reduce las vibraciones, comparada con los sistemas en los que el motor está en la columna de dirección. La asistencia de la dirección y su tacto también se pueden modificar mediante el sistema Drive Mode Select.
El motor diésel se dispone en tracción trasera o total, mientras que los de gasolina son trasera en el bajo de 255 cv y total en el alto de 370 cv.
Las versiones de gasolina cuentan con medidas asimétricas, llantas de 19 pulgadas más anchas atrás, las versiones diésel con llantas iguales en ambos ejes de 18″.
3+1 niveles de equipamiento.
En cuanto a los equipamientos, se ofrece con 4 niveles, Style, Xtreme, GT Line y GT, si bien los dos últimos comparten casi todos los elementos y es tan sólo una cuestión de detalles específicos de la mayor potencia del último que exclusivo del motor V6.
Desde el Style ya contamos con muchos elementos de categoría y confort, con climatizador doble, apertura sin llave, encendido de luces y limpiaparabrisas automáticos, cambio de luces de carretera automático, cámara de visión trasera, sistema de navegación, control de crucero activo, asiento del conductor con regulación eléctrica y freno de estacionamiento eléctrico. La tapicería es en símil piel.
El Xtreme añade algunos elementos de confort como, asientos delanteros con ventilación y delanteros y traseros calefactables, los dos delanteros eléctricos, con memoria el del conductor, volante calefactado y tapicería en piel. El conductor disfruta de serie de display proyectado y el techo es panorámico de cristal.
El GT Line aún va más allá, y aun acabado exterior diferente, con detalles de cromo oscuro en el marco de la parrilla, en la rejilla inferior, tomas de aire laterales del paragolpes y las carcasas de los retrovisores, un difusor negro brillante y, en las versiones T-GDI de 2,0 l, por la salida doble de escape. En cuanto a equipamiento añade elementos de asistencia a la conducción como, asistente cambio de carril, alerta tráfico trasero, cámaras exteriores 360º, faros direccionales, faros tecnología LED y pedales deportivos, y en cuanto a confort: portón eléctrico con apertura automática o cargador inalámbrico.
La variante GT en el tope de gama presentan los mismos elementos de cromo oscuro y el difusor negro brillante, pero con grupos ópticos de LED, dos salidas dobles de escape y discos de freno Brembo con pinzas rojas.
En el interior encontramos un salpicadero dividido en dos parte, con asientos de corte deportivo, tapizados en símil piel en los acabados bajos y en piel especial con diseño específico en el GT. Los motores de gasolina tienen volante achatado, y los GT Line y GT disfrutan de cuadro de mandos basado en una pantalla TFT de 7 pulgadas y están acabados con un recubrimiento interior del techo de ante negro, así como umbrales de las puertas de acero inoxidable.
El Kia Stinger llega a los concesionarios de la marca en este cuarto trimestre de 2017, desde 38.900 € y con una garantía específica de 7 años o 150.000 km, lo que antes suceda.