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Esta claro que en el fondo agradeces que los coches hayan evolucionado, una vez satisfecha la vista y el ego tradicional con el diseño y pequeños detalles retros, el que el puesto de conducción, la instrumentación y como veremos después, la mecánica sea del siglo XXI, es algo que debe ser así, y este Mustang cumple. Cuida al conductor con un puesto correcto, deportivo, de posición hundida, con asientos recogedores y cómodos, con reglajes parcialmente eléctricos, un volante agradable, del tamaño justo, de aro ancho, moderna instrumentación, aunque no de última tecnología digital, y pedales de aluminio con buen apoyo del pié izquierdo. En todos estos detalles un «diez».
Podemos encontrar cosas mejorables, está claro, pero piensa en los 112 euritos por CV que cuesta y lo verás con mejores ojos.
La consola central, pagándose aparte, cuenta con un monitor táctil con el sistema de navegación y un equipo de audio mejorado y si optamos por el «Paquete Premium Performance» además tendremos sensores traseros con cámara y una piel de más calidad para los asientos. Ello viste mucho más al coche, y ya es algo casi imprescindible hoy en día.
Las opciones de equipamiento cuentan con unos pocos más de detalles, además de este pack comentado, que si pinturas, alarma y asientos delanteros climatizados, presentes en nuestra unidad.
Instrumentación clásica con display moderno.
Cuando hablamos de un deportivo de categoría, es imprescindible una instrumentación más completa, pero aquí se mezcla lo clásico de dos relojes grandes, claros y sencillos con un complejo display central en el que hay mucha información, pero alguna de ella te gustaría que estuviera en un reloj específico, como la temperatura y presión del aceite o tensión de batería/alternador. En el display del cuadro de mandos está todo ello y mucha más información, pero bajo tediosos menús, como pasa en casi todos los coches modernos.
El Mustang no es especial en esto, tiene hasta ordenador de consumos, control de presiones de neumáticos, ajustes de los diversos sistemas como los pocos que cuenta de asistencia a la conducción y otras opciones diversas, como casi todos los Ford, pues es el mismo sistema y display. El Mustang tiene un detallito más, de esos que sobre todo a la gente más joven gusta, y es una aplicación para pista, con cronómetro y otros datos estadísticos.
5.0 que empujan pronto.
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