Mercedes ganaba la partida en el tablero de estrategia anticipando los cambios de neumáticos • Verstappen llegó a final de carrera con más velocidad pero fue penalizado
Lewis Hamilton se ha llevado la primera prueba del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 de la presente temporada, el Gran Premio de Bahrein, lo ha hecho por delante de un Verstappen que ha perdido la partida en la estrategia y tras una penalización por sobrepasar el límite de pista tras adelantar a Hamilton a falta de dos vueltas.
Los españoles Sainz y Alonso no tuvieron un gran estreno de sus monturas. Carlos Sainz tras unos entrenamientos esperanzadores, no le salió la vuelta en la Q3 y salió noveno, para terminar un puesto más arriba y Fernando Alonso abandonaba por problemas mecánicos en su Alpine.
La vida sigue… parecida.
Tras unos test de pretemporada en los que Mercedes parecía que no llegaba con el coche a punto, las cosas fueron mejorando en los entrenamientos oficiales, pero no lograron la pole que fue para Verstappen. Ambos ocuparon la primera fila y centraron el protagonismo de la carrera.
Con Verstappen por delante, Mercedes tuvo que tirar del manual de estrategias mientras en Red Bull se confiaba en la velocidad del holandés. Mucho más rápido que Checo Pérez, que salía desde boxes al pararse su monoplaza en la vuelta de instalación, y su labor era la de remontar.
Por dos veces, Hamilton anticipó el cambio de neumáticos, hasta la fase final donde los ingenieros de Verstappen decidieron que hiciera un segundo cambio de neumáticos, con ello calculaban que a 5 vueltas del final, Hamilton tendría detrás a su rival dispuesto a adelantarle con más ritmo, ya que los neumáticos de Hamilton estarían en peores condiciones.
El pronóstico se cumplió, Verstappen le alcanzó y le pasó, pero a la salida de la curva se pasaba del límite de la pista y los comisarios le exigían que devolviera la posición. Faltaban dos vueltas y Verstappen perdía el ritmo y no pudo volver a lograr el adelantamiento.
Carlos Sainz, octavo y octavo.
El piloto español de Ferrari se estrenó con un octavo puesto, el mismo que ocupaba en la salida. Una posición buena si miramos el pasado año de la escudería italiana, pero un tanto decepcionante, ya que no pudo mejorar el tiempo de la Q2 en la Q3, una mala vuelta que le dejaba a 4 puestos del de su compañero Leclerc. En carrera todo fue rodando sin muchos incidentes y pudo mantener la misma posición, mientras que el monegasco perdía 2 posiciones terminando sexto. Los dos McLaren se colaron delante, así como los dos Mercedes y los dos Red Bull, equipos a batir de momento este año.
Fernando Alonso fuera.
El otro español en liza se quejaba de que algún resto en pista había roto los frenos, y tras unas vueltas comprobando que el coche no estaba bien se retiraba, antes de darse un porrazo por culpa de unos frenos poco fiables. Alonso había salido noveno, era más o menos la posición que ocupaba cuando las cosas rodaban normalmente.
Lo importante es que sendos españoles estuvieron en Q3. Así como los dos Ferraris, algo que no ocurría el pasado año. El otro Alpine, el de Ocón salía 16º, no es una buena noticia para el equipo francés, Alonso tiene que apretar mucho para mantenerse entre los 10 mejores de momento.