La espectacular inyección de moral que supuso la gran actuación en la etapa 3 del martes (Termas de Río Hondo – Jujuy) ha tenido un efecto muy positivo en el equipo del Tatra 521
Albert Llovera-Charly Gotlib-Jaromir Martinec (Tatta Jamail T163) han demostrado en la 4ª etapa de ayer miércoles (el bucle Jujuy-Jujuy) que siguen superando las adversidades que se van encontrado y esto les lleva a situarse en la parte media de la clasificación de las etapas. Concretamente en la etapa de hoy, Llovera y sus compañeros han cubierto los 419 km de especial en un tiempo de 5h 25’37”, que les ha situado en la 31ª posición.
Llovera-Gotlib-Martinec, han cedido 1h 27’, respecto a los vencedores de la jornada, el equipo oficial Iveco formado por De Rooy-Torrallardona-Rodewald.
En esta ocasión la climatología, en referencia a la lluvia, se ha comportado con los equipos que siguen en carrera en el Dakar 2016. Durante esta 4a etapa el enemigo climatológico a batir ha sido el calor, a parte de la altitud. Toda la etapa se ha disputado, de manera regular, por encima de los 3.000 metros.
En el momento de iniciar la etapa Charly Gotlib ya comentaba que las tormentas y la lluvia darían una tregua a los participantes, lo comentaba de esta manera: «Las informaciones que nos ha pasado la organización nos hacen ser optimistas de cara a la etapa de hoy. Parece que en esta ocasión podremos disputar la etapa sin los problemas atípicos que nos afectaron ayer».
Llovera y sus compañeros han protagonizado una etapa de menos a más. Tuvieron un momento complicado antes de la llegada al CP1 que les hizo perder varias posiciones. Tomaron la salida en el puesto 36 y en este primeros km de competición llegaron a ocupar la 48a plaza. ¿El motivo? : «Se aflojaron un par de tornillos del interruptor del ventilador del embrague y tuvimos que arreglarlo, perdimos 40 minutos» – comentaba Albert».
A partir de este instante todo ha funcionado de manera perfecta y la remontada se ha confirmado, a la llegada de la especial, con la 31ª posición mencionada.
Sin duda han superado con nota la primera parte de la etapa maratón, el temor de Llovera era lógico: «Esta noche dormimos en Jujuy, en la mismo vivac que ayer, pero los equipos de asistencia ya nos esperan en Bolivia. Esto quiere decir que durante la jornada de hoy había que cuidar, aún más, la mecánica y las ruedas. Esta noche nadie podrá trabajar en el camión, ni nosotros».
La 5ª etapa, entre San Salvador de Jujuy y Uyuni, se iniciará con un largo enlace de más de 600 km para cruzar la frontera entre Argentina y Bolivia. La especial cronometrada, 327 km, se disputará en su totalidad en territorio boliviano. La gran dificultad de esta quinta jornada será sin duda la altitud, 4.500 metros, y que las mecánicas tendrán que cumplir su segundo día consecutivo de competición sin tener la asistencia habitual de final de la etapa anterior.
/Fuente: FotoSport