Cómo elegir un casco

En este artículo te orientamos sobre cómo escoger un casco para competición • Puedes encontrar diversos tipos y calidades en nuestra tienda online

El casco es quizá la protección más importante de un piloto, ya sea para tandas como para competiciones FIA. Ajustar el presupuesto a la necesidad es importante, para no gastar más de lo necesario, ni comprar uno que no cumpla con nuestra exigencia por ahorrar demasiado dinero, también.

Tipo de casco.

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es para qué lo necesitamos, en general será para un coche normal carrozado, un coche descubierto o un Kart. Y dentro de ellos el tipo de competición, por su duración, exigencia y prestaciones del vehículo.

Para todos tenemos un primer nivel de exigencia, si es para competición o es para tandas no federadas. En el primer caso, probablemente necesitemos un casco homologado por la FIA. Estas homologaciones suelen tener 5 años de validez desde que el casco está fabricado. Aunque en determinadas categorías de carreras se dan prórrogas, como es el caso de muchas de las pruebas regionales o autonómicas en España.

Una vez comprobada la necesidad de homologación, tenemos que hacer la segunda valoración nosotros, en ella intervienen cuestiones como la seguridad, en la que incluimos la obligación o necesidad de poder usar HANS*. Después en segundo orden tenemos la ligereza, el confort y las prestaciones.

Según el tipo de carrera, estas cuestiones tendrán más o menos importancia. Vamos por partes:

Kart:

Normalmente son carreras de corta duración. El casco ha de ser integral, ligero y sencillo. Y como en todos el nivel de protección ha de ir en relación a la potencia. No se necesita Hans, en kart se gira la cabeza para controlar a los rivales.

Vehículos abiertos, tipo fórmulas:

Las carreras de fórmulas son de corta y media duración, el casco ya debe ser integral, cómodo y con un nivel de protección alto, con anclajes para uso de HANS, con buena aireación interior (entrada y salida de aire). Preferiblemente con posibilidad de intercambio de pantallas y sistema de comunicación interior (micrófono y auriculares) si está permitido en la reglamentación, sino hay que usar auriculares tipo «pinganillo», que se coloquen en las propias orejas independiente del casco.

Vehículos cerrados, tipo Turismos y GT:

En general para éstos el casco puede ser abierto, será más confortable. La refrigeración natural es menos importante y para carreras largas puede interesar un sistema de refrigeración forzada así como de bebida. La resistencia del casco es menos importante que en un coche abierto, pero en función de la potencia, debería tenerse en cuenta. El uso de HANS, si no es obligatorio es recomendable, por lo que debería llevar anclajes para ello.

Las pantallas no son obligatorias y será cuestión de gusto usar pantallas para tratar la luz, en su lugar hay viseras regulables muy recomendables para hacer de parasoles, ya que puede que con el cinturón puesto no lleguemos a los del coche.

Imprescindible si es para rallyes que permita un sistema de intercomunicación cómodo. Esto es que tenga auriculares y micrófono incorporados así como conexiones, los sistemas de refrigeración y bebida son prescindibles, porque además complican la entrada y salida del coche frecuente en este tipo de pruebas. En los tramos hay concentración total y hay tiempo en enlaces para beber fácilmente.

En circuito hay que tener en cuenta si están permitidos los auriculares internos. Probablemente no y haya que usar de tipo «pinganillo», independientes del casco. Para carreras de resistencia se debe valorar un sistema de refrigeración forzada y de bebida.

Conceptos de los cascos:

Carcasa abierta o cerrada (Integral), la forma y el tipo ayuda en sus conceptos de ligereza y protección, los cascos abiertos son más cómodos pero con menos protección, los cerrados o integrales, siempre para vehículos abiertos lógicamente, son algo más pesados pero ofrecen más protección en la zona de mandíbula y boca.

Resistencia: a golpes y a perforaciones. En general los cascos tiene dos tipos de protección, su dureza frente a un golpe o aplastamiento y su robustez frente a una perforación al golpear sobre un elemento puntiagudo. En general son protecciones paralelas que implica más peso cuanta más protección tenga. Es la cualidad más importante y en la que interviene el material con el que está fabricado, desde fibras de vidrio, kevlar, compuesto de ambos o las fibras más caras que son las de carbono con diferentes niveles de dureza. También hay sistemas de fabricación como las multicapas.

Hans: debe llevar anclajes para este sistema de protección si tenemos previsto usarlo y si no elegir uno sin ellos que abaratará algo el precio.

Ligereza: la da el tipo de compuesto usado, las más ligeras en general son menos protectoras y hay que ir a compuestos caros para que la relación ligereza / resistencia sea buena, o sea que un casco ligero y resistente será más caro.

Confort: se debe tener en cuenta si el casco va a estar mucho tiempo puesto de continuo para valorar su confort, y lo más importante es el sistema de refrigeración. Un casco para un coche abierto debe tener un sistema de ventilación eficaz, que el aire entre y salga rápidamente cuanto más tiempo vayamos a permanecer pilotando. El sistema de bebida también es importante, aunque éstos pueden adaptarse a cualquier casco. También es importante el interior, que disponga de paneles interiores intercambiables, para su reposición su colocación o su limpieza y que dé compatibilidad a auriculares si es necesario.

Prestaciones: el casco ha de ser práctico, y se ha de saber si necesitamos conexiones de comunicación, intercambio de viseras y parasoles e incorporación de micrófono y auriculares. Si tiene conexiones para ellos y si el micrófono es regulable en su posición para la mejor claridad en la captación de la voz. Algunos disponen aditamentos aerodinámicos, para forzar ventilación o mejorar el confort con pequeños espoilers.

Cuadro resumen según características/competiciones.